miércoles, 11 de marzo de 2015

El Motor warp

 Introducción

La velocidad supralumínica es el resultado de la aplicación de la tecnología, de forma que es el campo el que se desplaza por deformación, cuyo índice se mide en factores de distorsión, por lo que en realidad, el objeto no viaja más veloz que la luz, sino que conserva su estado en referencia al campo subespacial consecuente de la distorsión. Por cada factor de velocidad es un grado de deformación de campo mayor, dando la sensación de estar viajando más veloz que la luz, pero realmente se desplaza el campo, deformando el espacio-tiempo a un factor determinado.

Tecnología

Para conseguir la energía capaz de soportar una deformación de campo de factor 1, es necesaria la manipulación de los campos ya existentes. Para ello, se opta por el desensamblaje de los campos existentes en la materia actual, mediante la combinación de antimateria y el subsiguiente control de la reacción y del plasma resultante. Dichos campos, se proyectan al exterior controlando las densidades del mismo, para la proyección de la masa inercial que se pretende mover.

El Nucleo warp

 

El núcleo consta de un acelerador de Deuterio/Antideuterio, que colisiona dichos átomos. La temperatura en el interior del núcleo es cercana a los 0ºK, necesaria para la proyección ordenada del flujo Materia/Antimateria. La colisión se produce en el interior de un cristal, denominado Dilitio por su estructura atómica. Dicho cristal a temperatura ambiente es altamente inestable por la rápida fisión de los átomos de Dilitio en átomos de Litio. A temperaturas cercanas a los 0ºK sus moléculas adoptan el concentrado tipo de Bose-Einstein. La estructura molecular en este concentrado permite catalizar las reacciones Materia/Antimateria por pares de cooper. Esto quiere decir que, los iones que se crean en el cristal de Dilitio, son alternos por franjas ordenadas y realimentados y amplificados por un campo electromagnético de alta frecuencia, de forma que la materia es canalizada por la franja correspondiente a la polaridad del ion de Dilitio que le corresponde, y la antimateria lo mismo. En el momento en que ambas partículas Materia/Antimateria cruzan sus caminos paralelos, las fuerzas electromagnéticas superan a las fuerzas iónicas del cristal, produciéndose un choque que libera ingentes cantidades de energía.
Dichas reacciones suponen un estrés estructural para el cristal, que acaba rompiéndose de no tomarse las medidas adecuadas.


Conductos EPS

 

En esos momentos, la estructura iónica del cristal realimentada por el campo EM de alta frecuencia, redirige el plasma resultante de esa colisión por conductos magnéticos a través del sistema de electro-plasma (EPS).

Barquillas

El cristal de Dilitio desprende grandes cantidades de electromagnetismo, que se transporta como energía eléctrica a las Bobinas de Deformación de Campo. Es necesario transportar la energía hasta las barquillas como corriente continua y alimentar las bobinas de esta forma. El campo magnético resultante permite que el plasma Materia/Antimateria (denominado en este caso plasma warp) se disponga en función del campo magnético generado por las barquillas, generando una emisión de taquiones que, en la interacción electromagnética, dan forma al hipercampo que se desplazará mas rápido que la luz. Lo alterno de la polaridad del plasma permite reconfigurar el campo warp por densisas del campo electromagnético, que junto con la regulación que realizan los inyectores, que dosifican y controlan la actividad del plasma, lo concentran en las bobinas de campo magnético con polaridad continua. En ellas el plasma se dispersa en función de su variabilidad y de la densidad de campo magnético dispuesto por las bobinas.

Deflector

La interacción del plasma con los vectores de fuerza magnética establecen el factor de distorsión, medido en milichrocanes, perdiendo su capacidad electromagnética en dicha interacción. El control de los flujos magnéticos permiten la formación del campo en forma asimétrica. El deflector desempeña un papel de estabilizador de campo y de timón navegacional, pues el flujo magnético converge en el deflector, que a su vez suministra una densidad magnética que permite el retorno de partículas como parte de la distorsión hiperespacial. Dicha reacción hace perder al plasma su actividad electromagnética, ganando velocidad y formando el campo deseado. El plasma no reactivo es desechado por las barquillas o reutilizado en otros aspectos de ingeniería.

Otras tecnologías

Otras civilizaciones utilizan fuentes diferentes de energía, como la Singularidad cuántica artificial pero la base es parecida.
De esta forma el núcleo alimenta las bobinas de deformación de campo, alojadas en las barquillas laterales, centrales y/o ventrales, de la nave.
En algunas naves como la Clase Intrepid, las barquillas están colocadas en pilones de geometría variable que les permite viajar a velocidades aún más altas sin dañar el subespacio. Posteriores avances tecnológicos permitieron a las naves más modernas como la Clase Sovereign tener un nuevo tipo de barquillas totalmente rediseñadas con los beneficiones de la geometria variable pero sin necesidad de ella.

Problemas de resonancia

El mayor problema, y es por el cual es tan delicada esta tecnología, es que los ciclos iónicos creados por los pares de cooper del cristal, y los iones formados por las reacciones Materia/Antimateria, sean coincidentes en el tiempo y ordenadas en la frecuencia. Ello crea una ruptura del cristal que inicia la fusión del núcleo: las fuerzas iónicas son tan poderosas que acaban colapsando los núcleos de Dilitio obteniendo Potasio. En ese momento, el cristal se rompe, las reacciones Materia/Antimateria se dispersan por el acelerador, se pierde la temperatura de refrigeración y las reacciones llegan hasta los depositos de Deuterio/Antideuterio, caso de no ser expulsado el núcleo a tiempo.

Historia

El primer motor warp logrado por los humanos fue construido por Zefram Cochrane y probado el 4 de abril de 2063. Ese mismo día se produjo el primer contacto de los humanos con una raza alienígena. A partir de ese logro la humanidad comenzó una nueva era de paz y desarrollo. Con el paso del tiempo, el motor warp se fue perfeccionando para lograr velocidades mayores; actualmente, las naves más rápidas de la Federación Unida de Planetas pueden alcanzar una velocidad máxima de Warp 9.999.

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